martes, 12 de enero de 2010

208. Pigmalion

En muchas ocasiones sí que es cierto, ya que el hecho de que algo pueda salir mal sobre todo significa que nosotros pensamos que puede salir mal. El pensamiento influye en nuestras actuaciones. Si pensamos que no podemos conseguir algo, no lo intentamos. Otra persona piensa que sí puede y acaba consiguiendo lo que nos parecía imposible. Entonces pensamos que esa persona es mejor. Simplemente le puso más ganas (aunque también cuentan factores hereditarios y todo eso). Pero hay veces en que simplemente hay una posibilidad de que algo salga mal, y no tiene por qué salir mal, y eso no depende de nosotros. Ejemplo cutre: Si necesito que salga un tres en un dado, por mucho que piense que me va a salir un tres, le sople al dado o me ponga a rezar no vamos a verlo más veces, a no ser que haga algún truco.

¡Hola! Gracias por pasarte y seguirme. Sí, es una grandísima pena.
Miranzo, por mucho que veas a Dios en un ateo, bastantes ateos entran en conflicto con lo cristiano, ya que intentan que los cristianos abandonen sus creencias. Por tanto, el cristianismo nos exige, según esa frase, que dejemos de lado a esas personas. Y las creencias espirituales no son una razón para ser o no amigo de alguien. Especialmente porque nadie sabe quién tiene razón. Cada uno pensará que el otro está equivocado y nada más. De todas formas, me gustan las conversaciones que tenemos porque también sirven para conocernos.

Hoy ha sido un día divertido. Para empezar, Religión. Nos ha dicho que relacionáramos unas cartas de Pablo con su teología y mientras se ha puesto a hacer algo con el ordenador. Estaba escribiendo, y el de delante me dice, seguro que está con el Messenger. Le contesto, no puede ser, porque lleva escribiendo mucho rato y en el Messenger escribes un poco, lees, escribes otro poco... Además, ¿cómo va a conectarse a Internet? Me responde, por aquí hay Wifi, ¿no lo sabías? El caso, que empezamos a pensar que sí estaba chateando. A veces incluso se reía. Luego mandó un beso sutil a la pantalla, y le digo, y estará con la web cam y todo. Eso mismo estaba pensando yo, me contesta, te lo iba a decir ahora mismo. Y al final de la clase la profesora nos dice que está hablando con un hermano que está en una misión en la India, que nos lo va a presentar, y gira el ordenador. Tenían hasta el micrófono.

Después hemos ido al teatro. Yo iba con una chica, y cuando llegamos me dice una profesora, ven, que te voy a poner en un sitio mejor. Le respondo, ¿dónde?, y va y me coloca con los que están un curso por debajo, al lado de uno que estaba en mi clase y repitió hace años. Un sitio mejor, claro. La obra ha estado bien. Era en inglés. No entendía todo, aunque más o menos me he enterado. Lo que nadie ha comprendido bien ha sido el final. La chica se pone triste de pronto y se quiere ir, así.
A la vuelta del teatro, estaban dos de mi grupo comiendo madera. Yo flipaba. Más tarde he visto que tenían bastante y no me creía que fuera madera, así que he preguntado y dicen que sabe parecido al regaliz. Aunque conociéndolos, al principio me lo he creído y todo. Cuando fuimos a Sierra Nevada se comían la nieve.

La última hora ha sido genial. La chica que se sienta detrás de mí tiene un gel para lavarse las manos sin agua. A los de mi clase les gusta mucho cómo huele (parecido al alcohol) y se lo piden. Resulta que el gel se había quedado en mi mesa, no sé por qué, y va el tutor y lo coge (a veces coge cosas de las mesas de pronto de broma, y al rato las devuelve), supongo que pensando que era mío. Entonces le he explicado a esta chica que el profesor le había quitado el gel, pero no lo entendía. El profesor me ha visto hablando, me ha mirado raro y le ha dicho a uno, dile que se calle. Yo me he reído. El chico me ha dicho que me callara y me he reído aún más, por la forma tan estúpida en que se había liado todo. Y va el tutor y le da cinco céntimos al niño. Con esto me puedo comprar un chicle, exclama bajito. Luego, el chico este me ha preguntado algo, el profesor lo ha visto y le ha dicho, devuélveme los cinco céntimos. Qué risa.

¿Sabías que...?
La Ciudad del Vaticano es el país más pequeño del mundo, y Rusia el más grande. La Antártida es el segundo territorio (¡es un continente!) más grande.


La pregunta de hoy es:
¿Sólo podemos soñar con lo que conocemos?

Goodbye, farewell, you'll never see me again.

2 comentarios:

  1. Veo que te lo has pasado bien XD

    comer madera debe seerr muuy ummm.... poco sano? XD

    Si Ale, la Antartida es un continente, cada vez aprendes algo nuevo XD

    Podemos soñar con cosas q no hayamos visto nunca, pero entonces en el instante en el q las soñamos pasamos a conocerlas, aunque sea solo una pequeña parte.

    Tambien peude ser que ese conocimiento este inmerso en las cavernas de nuestro pensamiento, que no lo hayamos pensado nucna y que justo en ese sueño lo encuentras, en ese caso solo soñariamso ocn lo q conocemso, aunque no lo supiesemos

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  2. ¿Y qué tiene que ver Pigmalion en todo esto?

    Anduve medio ausente estos días, el efecto vacaciones debe ser =P

    Podemos imaginar (soñando) cosas que no conocemos no? Eso me recuerda al cuento "la noche boca arriba" de Julio Cortázar, igual no creo que lo conozcas xD

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