viernes, 1 de octubre de 2010

350. Gye!

Lo cierto es que me es muy complicado elegir algo concreto con lo que me quedaría. En general, la experiencia me ha gustado mucho, incluyendo tanto momentos buenos como otros que no lo fueron tanto. Si tengo que escoger, creo que me quedaría con la gente a la que he conocido gracias a esto (aunque hayan acabado desapareciendo de una forma u otra), con los comentarios que me han ayudado a reflexionar o a corregirme cuando estaba equivocada y, por supuesto, con las pocas veces, pero haberlas las hubo, en las cuales alguien me comentó que se había emocionado con alguna de mis entradas.

Bien, esa no fue la última entrada. Pero esta sí lo es. Habría sido muy extraño cortar el blog con la entrada anterior, ¿no?
Ya sé que no tienes Tuenti, por eso decía lo de invirtarte, aunque imaginaba que no. Seguro que hay alguien que tenga sin ser de España.
Sí, todos mis profesores eran hombres... hasta que uno se cayó por las escaleras, se fracturó el codo y fue sustituido por una chica joven por la que todos los salidos y desesperados de mi clase babean. Encima no es que sea especialmente guapa... No tienen remedio. La explicación de esto tiene su origen en que el colegio era masculino hace unas pocas décadas, y los profesores duran bastante tiempo.
Lo de Religión, en parte, sí era una opinión como dices, pero él iba a contradecírtela como pudiera. Creo que en una clase el profesor llamó a uno inculto por decir que Dios no existe. Por eso hay que tener cuidado con lo que se opina en algunas ocasiones. El jueves estuvimos viendo este tema en los primeros capítulos del Génesis y, según el profesor, quieren decir que el mal proviene del hombre, porque quiere parecerse a Dios o ser como otros hombres, que considera mejores por envidia, yendo en su contra. Igualmente, aprobar es bastante sencillo, aunque la gente es capaz de suspender también.

La despedida seguramente no será ni la mitad de lo poco espectacular que pudieran ser otras entradas como aquellas cuyo número acabó en dos ceritos, y lo siento, pero ya no sé qué más decir. Sobre todo, gracias por enésima vez a todos los que me habéis acompañado en este viaje de año y medio, aunque no haya sido siempre. Esta experiencia termina aquí. No fue la primera, y es posible que tampoco sea la última. Lo que no sé es cuánto tardaré en volver...
He estado mirando las preguntas de la primera entrada, y voy a probar a responderlas brevemente de nuevo.
- ¿Para qué ha sido este blog?
Creo que más o menos ya se ha visto, ¿no? Generalmente, para compartir mis vivencias cutres y rutinarias, especialmente cuando lo eran un poco menos, y para desahogarme de alguna manera, cosa que me parece que no necesito, al menos no aquí.
- ¿Por qué se llama así?
Esta respuesta sigue siendo la misma, aunque el nombre ya dejó relativamente de ser importante. Por otro lado, este espacio en ocasiones ha sido un pequeño cielo para mí.
- ¿Y por qué tiene dos ies?
Idem. Aún hay gente en mi clase que escribe de esta forma. Igual que hoy se han puesto a jugar a ver qué fila llegaba más cerca de la pizarra, y viceversa más tarde.
- ¿Por qué cada entrada tiene un número?
Bueno, ya se ha visto la utilidad, ¿no? Hay unas pocas entradas que no son mías.

Ahora sí que terminé. Si veo necesario responder a un comentario, contestaré con otro. ¡Hasta otra!

¿Sabías que...?
Desde mi cielo es una novela dramática corta de la escritora estadounidense Alice Sebold que llegó a ser un éxito de ventas (bestseller). Su nombre original es The lovely bones.
http://es.wikipedia.org/wiki/Desde_mi_cielo


La pregunta de hoy es:
¿Te gustaría que creara otro blog?

Y desde mi cielo os esperaré escribiendo.

♥♦♣♠ Contador de visitas Desde mi cielo =) ♣♦♠♥