339. Pho

El sábado, por supuesto. En vacaciones me da igual, pero cuando hay clase es el dia en que puedo relajarme más. El viernes hay clase por la mañana, y el domingo tengo que irme pronto a dormir porque el lunes madrugo. El curso pasado, mi día de clase preferido era el viernes, no solamente porque acababa la semana sino también porque no había asignaturas fuertes (en mi opinión).

Recuerdo que hace varios años no soñaba con frecuencia. Últimamente recuerdo mis sueños casi todos los días, y a veces incluso son varios, que no tienen relación alguna entre sí. Me gustaría poder describir alguno, como ya hice hace un tiempo. El problema es que no me acuerdo suficiente de lo que ocurre cuando quiero escribir sobre ellos. Además, tengo menos pesadillas, no sé por qué. Pero, por mí, genial.

Día undécimo.
Esta mañana hemos decidido hacer un pequeño cambio en el trayecto: hemos llegado a dos boyas en vez de a una, como era habitual. Además, mi padre se ha llevado el móvil en la colchoneta por si lo llamaban para no sé qué, y hemos aprovechado para hacer fotos. Casi todas están bastante mal, porque se movía todo el rato con las olas, por muy suaves que fueran, aunque hay alguna divertida.
Por la tarde hemos ido... ya lo adivináis, ¿no? Pues eso, a la boya de nuevo, y otra vez con el móvil.
Ya se acaban los días de playita... De todas formas, pienso que ha durado lo que debía, ni más ni menos. Últimamente tengo esa sensación con todo. Supongo que es bueno, al menos en parte.

¿Sabías que...?
Dióxido de carbono, metano, óxido nitroso... son los gases que más contribuyen al efecto invernadero, según el archiconocido Protocolo de Kyoto. Coches, aviones, motocicletas... son los primeros “culpables” que vienen a la mente. Pero, según un informe del departamento de Alimentación y Agricultura de Naciones Unidas, la ganadería y, sobre todo, las vacas llevan marcado este particular estigma. Una vaca produce, por año, unos 66.000 litros de metano, según el argentino Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta). Si los vehículos representan el 13% de los gases de efecto invernadero, la ganadería supone el 18%. Otros informes inflan todavía más esta cantidad. De ahí que uno de los retos de las empresas especializadas en alimentación animal sea bajar la cantidad de emisiones por kilogramo comido por cada animal.


La pregunta de hoy es:
¿Prefieres leer o escribir?

They say it's my fault.