28. Qué punto

Buf, qué mal que se entendió la pregunta. Si ya lo sabía yo, pero por otra parte pensé que la conoceríais, porque yo la he oído alguna vez, y por eso no la expliqué. Además no es muy fácil de explicar. Me refería a que si no fueras tú pero tú existieras, que si te caerías bien a ti mismo (es decir, quien eres realmente, ahora). Yo pienso que si me hicieran esa pregunta, probablemente respondería que no. A la mayoría de la gente no le caigo muy bien, así que si fuera otra persona lo más normal es que pasara lo mismo. Aunque quizá es porque no me conocen lo suficiente.

El disco no es el problema. Los derechos de administrador tampoco; eso ya lo probé. A lo mejor sirve lo de copiar la carpeta. Pero para mí que tampoco funcionará, porque seguramente el juego instala archivos en la carpeta de Windows y no sé cuáles son.

Supongo que si las Matemáticas me gustan es porque tengo una base y porque las entiendo. Seguramente eso es lo que le pasa a la mayoría de los que no les gustan. No entienden gran parte de lo que les explican. Y como la poesía normalmente no la entiendo no me gusta.

En el examen de Matemáticas de estadística ha puesto una pregunta que decía que qué probabilidad había de sacar un número que no recuerdo de espadas en una baraja francesa. Yo no sé si estas cosas son propias de un examen de estadística o de una prueba de atención al leer. Encima va el profesor y dice que en la baraja francesa sólo hay corazones, diamantes, tréboles y picas. Entonces, ¿para qué pone la pregunta? Me dan rabia las ganas que tienen de aprobar a todo el mundo cuando no hacen absolutamente nada. Y la sustituta de Lengua ya se pasa. Las recuperaciones de los exámenes se hacen oralmente, pero la del último la hizo por escrito, diciendo qué cosas no hacía falta estudiarse cuando siempre han hecho falta, e incluso reduciendo lo que había que estudiar a más de la mitad. Y después en la otra clase que da, le dicen que no se saben las preguntas y ella les dice que pongan las que quieran. Para colmo, en mi clase hubo gente que no recuperó, y les dijo que iba a hacer como si hubieran recuperado todos para que no les bajara la nota. Venga ya, esto ya pasa de castaño a oscuro. Y ellos tan felices. Normal.
Al menos la sustituta esta es divertida. Hoy ha hecho una parodia de que uno de la clase, que era el rey, nombraba caballero a otro. Había otra que hacía de reina, y llevaba un trapo para borrar la pizarra que supuestamente era el pañuelo que se les da a los caballeros. Cuando se lo ha acercado a la cara, él le ha dado con la mano y le ha llenado el pantalón de tiza. Vaya personajes.

En Religión ha sido la foto grupal, que a vayas horas; normalmente es a principio de curso. Cuando hemos vuelto a clase, nos dice el profesor que luego decimos que nos llaman pijos. Estamos todos callados y va una y suelta: ¡Yo no soy pija! Todos nos hemos reído, y el profesor dice que menos mal que nos conoce y sabe que realmente no somos así. Y yo pensando, pues menos mal que no las conoce en serio, porque si no...

Cada día la gente me demuestra más lo falsa que es. En el recreo, han visto un bocadillo envuelto. Alguien preguntó que de quién era, y otro le dijo que era de una chica de cuarto. Parece ser que esa persona no les cae muy bien, porque empezaron a aplastar el bocadillo. Yo alucinando. Y siempre que la ven hablan con ella normal, e incluso riéndose. Este tipo de situaciones me hace pensar en qué pueden decir de mí por detrás. Aunque en parte me da igual.


La pregunta de hoy es:
¿Prefieres monarquía o república?

Entonces descubrí que ya mirabas diferente.